¿Binance te delata en la declaración de la renta? Errores, polémicas y cómo evitar problemas con Hacienda
- Franco Fernandez
- hace 8 horas
- 7 Min. de lectura
Cada vez más inversores españoles usan Binance para comprar y vender criptomonedas, pero también son cada vez más los que están en el punto de mira de Hacienda.
Esto demuestra que quien crea que el dinero digital es “invisible” para el fisco está muy equivocado. Hacienda sabe quién tiene criptomonedas y recuerda activamente las obligaciones de declarar, gracias a los datos que obtiene de bancos y plataformas de intercambio.
En la campaña de la Renta 2023 (presentada en 2024), la Agencia Tributaria anunció que enviaría cerca de 948.000 avisos, muchos las llaman “cartas del miedo”, ya que advierten de que la Agencia Tributaria conoce tus criptos y espera que las declares.

Errores comunes que pueden costarte caro
Uno de los errores más frecuentes es no declarar las operaciones con criptomonedas creyendo que Hacienda no puede rastrearlas. Durante años, algunos inversores pensaron: “mientras no pase mis bitcoins a euros, nadie lo sabrá”. Falso. Hoy Hacienda tiene herramientas para identificar movimientos cripto, tanto mediante el Modelo 721 (activos en el extranjero) como el Modelo 172 (saldos en exchanges).
Otro fallo habitual es pensar que Binance, por ser extranjero, te exime de informar. Si al cierre de año tienes más de 50.000 € en criptomonedas custodiadas por exchanges extranjeros (no residentes en España), en general estás obligado a informar en el Modelo 721. En el caso de Binance, la situación es más matizable porque existe una filial española registrada en el Banco de España; por eso es clave revisar, con tu asesor, qué entidad concreta figura como custodio en tu caso antes de decidir si entra o no en 721.
A su vez, no incluir tus ganancias de Binance en la renta (IRPF) se considera ocultación de ingresos. Las sanciones van desde un 50% de la cuota defraudada (casos leves) hasta un 150% (casos graves), y si ocultas más de 120.000 € es delito fiscal con posible pena de cárcel.
Por ejemplo, si no declaraste 10.000 € de ganancias cripto, Hacienda podría reclamarte esos 10.000 € más entre 5.000 y 15.000 € en multas.
En foros y redes circulan historias de usuarios que tras varios trades en Binance recibieron cartas intimidantes de Hacienda. No es para menos: la propia Agencia Tributaria alardea de que “ya conoce los nombres” de quienes operan en plataformas como Coinbase o Binance.
Este clima ha llevado a algunos criptoinversores a medidas extremas, como contemplar mudarse al extranjero para escapar del “infierno fiscal” español. Pero cuidado: salir corriendo después de evadir impuestos solo agrava los problemas legales, y hoy por hoy tratar de esconder criptos es prácticamente imposible. Entre las nuevas obligaciones de España (modelos 721, 172, 173) y la cooperación internacional, el que crea que “Hacienda no se va a enterar” está jugando con fuego.
Binance y Hacienda: ¿aliados en tu contra?
Veamos la gran pregunta: ¿Binance informa a Hacienda? La respuesta es sí. Desde 2024, los proveedores de servicios cripto registrados en España o con presencia sujeta a los modelos 172 y 173 están obligados a reportar a Hacienda saldos y operaciones de sus clientes. Binance Spain, S.L., al estar inscrita como VASP en el Banco de España, entra en ese radar.
Esto obliga a Binance a enviar a Hacienda información detallada sobre saldos y operaciones de usuarios españoles. En otras palabras, Hacienda puede obtener tus movimientos de Binance directamente del exchange, independientemente de lo que tú declares. Para el fisco, Binance se ha convertido en un informante más.
Esto ha generado posturas encontradas en la comunidad cripto. Algunos lo ven como una “traición” a la filosofía de privacidad financiera: la plataforma que antes presumía de libertad ahora coopera con el mismo sistema del que muchos querían escapar. Otros, más pragmáticos, señalan que es el precio inevitable de la adopción masiva: si Binance quiere operar en España (y la UE), tiene que acatar las normas locales.
De hecho, la tendencia es global: En 2025 España ha aprobado la ley que transpone la directiva europea DAC8, con efectos plenos previstos a partir de 2026. Esta norma obligará a los proveedores de servicios cripto (CASP) a reportar de forma automática operaciones y saldos de sus usuarios a la Agencia Tributaria.
A partir de 2026, con la reforma de la Ley General Tributaria ligada a DAC8, Hacienda tendrá expresamente regulada la posibilidad de embargar criptoactivos (incluidos los custodiados en exchanges) para cobrar deudas tributarias.
Por supuesto, Binance ofrece a sus clientes herramientas para facilitar el cumplimiento, como informes de ganancias/pérdidas descargables (el llamado “informe fiscal” de Binance) para ayudar a preparar la declaración. Incluso ha publicado guías recordando a sus usuarios que declaren sus criptos correctamente, en un tono casi irónico viniendo de un gigante cripto.
En cualquier caso, queda claro que Binance no te va a encubrir frente a Hacienda. Si no declaras, no puedes culpar al exchange: la responsabilidad (y las sanciones) serán únicamente tuyas.
Dudas frecuentes de criptoinversores sobre la renta
Es normal que surjan dudas al enfrentarse por primera vez a la declaración de la renta con criptomonedas. Aquí respondemos brevemente a las más comunes:
“Si no saqué el dinero del exchange, ¿igual tengo que declarar?” Sí. Toda venta, permuta o uso de criptomonedas es un hecho imponible, haya o no haya conversión a euros. Si en 2024 intercambiaste, por ejemplo, ETH por BTC en Binance y obtuviste una ganancia, debes incluirla en tu IRPF 2024 (a declarar en 2025). Solo comprar y holdear no tributa, pero en cuanto hay una transacción con ganancia/pérdida, se declara.
“¿Hacienda realmente sabe lo que tengo en Binance?” Prácticamente, sí. Con los nuevos modelos 172 y 173, las empresas envían datos de saldos y movimientos a Hacienda. Y con el modelo 721, tú mismo debes informar de tus tenencias en exchanges extranjeros si superan 50.000€. Además, España cruza datos internacionales: Para 2025, entre los modelos 172/173, el 721 y los intercambios de información tipo DAC7/DAC8, Hacienda recibe ya datos de forma muy automatizada sobre operaciones y saldos cripto, incluso cuando operas en plataformas extranjeras de países que colaboran.
“Tengo pérdidas netas, ¿aun así debo algo?” – Debes igualmente declararlo. Las pérdidas no conllevan pagar impuesto, pero declararlas te conviene porque puedes compensarlas con ganancias de los siguientes años. Además, si tus ganancias patrimoniales no sujetas a retención (por ejemplo, muchas operaciones con criptomonedas) superan ciertos importes (en la práctica, en torno a 1.000€), es muy probable que estés obligado a presentar la renta aunque no alcances los mínimos de rendimientos del trabajo.
Y recuerda: si tu patrimonio cripto es grande, podrías tener que declarar en Patrimonio o en el nuevo Impuesto de Grandes Fortunas (si superas 3 millones de euros) simplemente por tener cripto, aunque no vendas.
“¿Qué pasa si metí mal algún dato o se me olvidó algo?” – No entres en pánico. Existe el derecho al error: Hacienda permite corregir declaraciones sin sanción si actúas antes de que ellos te requieran. Si descubres un fallo, presenta una declaración complementaria lo antes posible explicando la corrección. En cambio, si Hacienda te envía una notificación antes, ya estarás en fase de inspección y podría haber multa (aunque cooperando y enmendando se puede atenuar). La clave es ser proactivo.
“¿Y si nunca declaré nada de años pasados?” – En ese caso, es recomendable regularizarte cuanto antes. Puedes presentar declaraciones de años anteriores (una por año) para incluir las criptos omitidas. Tendrás que pagar la cuota pendiente más intereses y un recargo del 1% más un 1% adicional por cada mes completo de retraso hasta 12 meses; si pasan más de 12 meses, el recargo fijo es del 15% más intereses de demora. Pero hacerlo voluntariamente es mucho mejor que esperar a una inspección: evitas las multas por ocultación, que son lo realmente doloroso. Como dice el refrán, más vale pagar tarde (y un poco más) que nunca y enfrentarse a sanciones.
Cómo evitar inspecciones (y dormir tranquilo)
La gran pregunta es cómo evitar atraer la atención indeseada de Hacienda. No hay fórmula mágica, pero sí buenas prácticas que reducen mucho las probabilidades de problemas:
Declara todo lo que corresponda: Puede parecer obvio, pero el paso fundamental es cumplir con todas tus obligaciones. Incluye todas tus ganancias cripto en la renta anual (IRPF). Si tus criptos en exchanges extranjeros superaban el umbral, presenta el modelo 721 en plazo.
Lleva registros detallados: Mantén un historial organizado de todas tus operaciones (fechas, valores de compra/venta, comisiones, etc.). Usa hojas de cálculo o herramientas especializadas para consolidar tus movimientos de Binance y otros wallets. Esto te permitirá justificar el origen de fondos y cálculos sin fisuras si Hacienda pregunta. Además, la ley exige conservar documentación durante al menos 4 años.
Revisa el informe fiscal de Binance: Binance facilita un resumen de tus transacciones anuales. Descárgalo y compáralo con lo que vas a declarar, para asegurarte de no omitir nada. Ojo: si operaste en más plataformas, tendrás que unificar todos los datos (por ejemplo, sumar ganancias/perdidas de Binance + Coinbase, etc.). Cualquier discrepancia notable entre lo que informan los exchanges y tu declaración podría detonar una alerta.
No minimices “pequeñas” ganancias: Muchos piensan que si ganaron poco, no pasa nada. Error. Hacienda ha dejado claro que aunque sea 1 € de ganancia, toca declararlo (legalmente, desde el primer céntimo). Y gracias al cruce de datos, incluso pequeños beneficios no declarados pueden salir a la luz. Mejor ser honesto desde el principio; evitarás que una suma modesta se convierta en una multa sustancial.
Asesórate si es complejo: Si realizaste muchísimas operaciones, usas DeFi, staking, etc., la fiscalidad puede volverse enrevesada. En tales casos, contar con un asesor fiscal especializado en cripto puede marcar la diferencia. Un buen profesional te ayudará a optimizar dentro de la ley (por ejemplo, aprovechar pérdidas para compensar ganancias) y a presentar todo correctamente. Invertir en asesoría es mucho más barato que enfrentarse a sanciones del 50-150% por hacerlo mal.
En definitiva, si tú cumples las reglas, documentas bien tus movimientos y corriges rápido cualquier error, lo más probable es que tu declaración pase desapercibida entre las miles que revisan – y podrás seguir invirtiendo en cripto con tranquilidad.
¡Nos vemos en el próximo post de Zenblock!



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